Parece que se cierran etapas
y el calendario mira atrás
buscando el día más amable.
Pero el tiempo no habita en nosotros
cuando nos cruzamos de brazos
y envejecemos en la costumbre de la espera.
Ayer quise ser diciembre
y hoy ya sólo pienso en ser enero,
pero el tiempo no habita en mi,
se escapa de los latidos de tu nombre
resbalando más allá de la distancia.
Y qué lejos estamos de ayer...
La mesa está dispuesta,
las velas encienden propósitos
y el tic tac del reloj anuncia que se cierra una etapa.
Me quedo con aquella noche inventada para nosotros,
la tarde que fuímos los únicos que habitaban este planeta.
Los Secretos - 'En este mundo raro'