Bajo este techo de nubes
enciendes un rumor,
la corriente que trae mensajes
de plazas desnudas de pájaros,
de viejos bares y otros tiempos.
Es difícil respirarte sin pensar
en el azul de tus ojos oscuros,
esos que esperaban un paso al frente,
un plan de emergencia
o simplemente un par de palabras.
Ahora es fácil escribir historias
sobre nosotros con un buen final.
El futuro ya está aquí.
Descansamos en camas separadas
y hasta soñamos.