mi compañero y amigo
de viajes, bares y servilletas
y otras perversiones
empezó esté 'Ya no estás'
me pidió continuarlo...
y entre los dos salió esto:
gracias Jesús
Esta mañana desayuné
café con leche,
un par de tostadas
un par de tostadas
y las ganas de volverte a ver
Sé que hoy, como ayer,
amanece un nuevo día
con la despechada esperanza
con la despechada esperanza
de camas sin deshacer.
Y ya no estás en mi buenosdías
sólo queda lo que ves,
mermelada y mantequilla
y toda una vida por rehacer.
En la calle el frío eriza mi piel,
ando mirando al suelo,
con nadie cruzo miradas,
mis ojos ya no te ven.
A mediodía me siento a comer,
delante tu silla vacía,
y en las noticias cuentan
que ya no vas a volver.
Y ya no estás en mis alegrías,
sólo quedan sonrisas del revés,
madrugadas a la deriva
y una huída sin entender.
Por la noche cierro bares,
quemo ciudades sin saber
que tú ya no estás en ellas,
que jamás vas a volver.
Y ya no estás en mis poesías
solo cenizas, sombra y sal
que se diluye entre mis penas
de saber que ya no estás.
En la calle el frío eriza mi piel,
ando mirando al suelo,
con nadie cruzo miradas,
mis ojos ya no te ven.
A mediodía me siento a comer,
delante tu silla vacía,
y en las noticias cuentan
que ya no vas a volver.
Y ya no estás en mis alegrías,
sólo quedan sonrisas del revés,
madrugadas a la deriva
y una huída sin entender.
Por la noche cierro bares,
quemo ciudades sin saber
que tú ya no estás en ellas,
que jamás vas a volver.
Y ya no estás en mis poesías
solo cenizas, sombra y sal
que se diluye entre mis penas
de saber que ya no estás.