Pasó el tiempo demasiado veloz
para ella y para él,
para los dos
para ella y para él,
para los dos
nunca se llegaron a querer ..
y sus vidas comenzaban a resbalar
paseando de la mano
la indiferencia y la soledad
en un hogar partido por la mitad
…primavera de puertas a fuera
y en su casa reina la oscuridad…
Ya no había calor en sus abrazos
ni ese guiño de complicidad
ni besos que cada día regalar
ni miradas que se crucen con pasión
ni sonrisas y “buenos días” al despertar
Y las caricias y “te quieros”
caen rodando bajo el sillón
que ya no se agachan a buscar
paseando de la mano
la indiferencia y la soledad
en un hogar partido por la mitad
…primavera de puertas a fuera
y en su casa reina la oscuridad…
Ya no había calor en sus abrazos
ni ese guiño de complicidad
ni besos que cada día regalar
ni miradas que se crucen con pasión
ni sonrisas y “buenos días” al despertar
Y las caricias y “te quieros”
caen rodando bajo el sillón
que ya no se agachan a buscar
dos extraños frente a un televisor
mudos y sordos de conversación
mudos y sordos de conversación
y en la cama fría como el congelador
roncan corazones que olvidan el verbo amar
pijamas con bolsillos vacíos de amor
Y de fondo
sólo se oye el tic tac del reloj
ese que apresura un anunciado adios
En el fondo
ya no son uno…sino dos
Y pasaron de la alegría a la tristeza
portazo y cuenta nueva
…nunca más se volvieron a ver…
Pero cada noche en la distancia
sus camas arrimaban
y compartían sueños y almohada
hasta el amanecer.
Y aún se preguntan …“¿por qué?”
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