No existen los finales en la vida.
He visto montes ardiendo
escondiéndose del agua,
playas que reclaman su parte de fuego
y mareas de humanos
que huyen de la vida para vivir.
Todo se ve desde esta ventana,
sin que mis pies doblen las esquinas
ni mis manos repasen los periódicos.
Y todo, dicen, tiene un final.
Pero todo final es el inicio
de esta evolución sin máscaras,
el epílogo de un libro a corazón abierto.
Las sílabas de tu nombre. Las del mío.
No existen los finales en la vida, amor,
tan solo son tus ojos
que pestañean lentamente.
es curioso hoy mismo he puesto en twiter que los finales son principio y después de unas horas leo tu poema....
ResponderEliminarque por supuesto me gusta ;)
besicosss
Hola Desconcierto!!
ResponderEliminarTodo principio tiene un final y vuelta a empezar,es una rueda que gira constantemente y sobre todo el amor,se ama siempre,siempre tienes el corazón lleno.
Cómo era eso de tus pestañas?,me gustó!!
Un abrazo
Charcos...es que es una idea que se repite siempre en muchos textos...y siempre giramos...que no paremos!
ResponderEliminarEstrella
ResponderEliminargracias!
eso de las pestañas?? jajaja
un lento pestañeo hace que se pare el mundo, no crees?
un ebso