Hay más de un cielo en esta ciudad,
y más de un vida en mi vida de nómada
que se pierde en desiertos de asfalto,
azules que se mezclan con el gris
que consume los pulmones
y la paciencia.
Cruzo el puente que une continentes,
solitario, vencido a las seis de la tarde,
sobreviviendo al frío, a los bares,
a los silencios que quedaron en los bolsillos,
sobreviviendo a mi mismo,
y más de un vida en mi vida de nómada
que se pierde en desiertos de asfalto,
azules que se mezclan con el gris
que consume los pulmones
y la paciencia.
Cruzo el puente que une continentes,
solitario, vencido a las seis de la tarde,
sobreviviendo al frío, a los bares,
a los silencios que quedaron en los bolsillos,
sobreviviendo a mi mismo,
..................convencido de sobrevivir a ti.
Hay más de un cielo en mi ciudad,
una cruz, una media luna, una oración
que enigmática atraviesa mis párpados,
lenguas que se enredan en mi lengua,
anónimas mis vidas que recortan el horizonte
de esta ciudad escribiendo un nombre.
No preguntes por mi,
nadie sabrá en qué cielo
he parado hoy a descansar...
POr eso las miradas cambian, porque depende qué cielo sea el que se refleja en ellos.
ResponderEliminarVolví, porque adaba dispersa, que no es lo ismo que amnésica.
Besotes